domingo, 1 de abril de 2012

Fernando Botero. Una celebración en México


Flores (2006)
Este 29 de marzo el Museo del Palacio de Bellas Artes, del INBA, abrió al público la exposición Fernando Botero. Una celebración, la mayor retrospectiva realizada hasta el momento de quien ha sido sin duda uno de los más reconocidos artistas latinoamericanos desde la segunda mitad del siglo XX. La muestra forma parte de los festejos por sus ochenta años de vida, mismos que también incluirán exposiciones en España, Brasil e Italia.
La exposición fue realizada con el apoyo de Amigos del Museo del Palacio de Bellas Artes, Credit Suisse (patrono corporativo del museo por segundo año consecutivo), la Fundación Mary Street Jenkins, la Gerencia del Palacio de Bellas Artes, el Goethe-Institut Mexiko, El Palacio de Hierro, Montblanc y Casa Torres.
Se trata de la quinta ocasión en que Botero exhibe en México. Tras la primera exposición en México, realizada hace más de cincuenta años, expuso en 1989 en el Museo Rufino Tamayo, en 1999 en el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey MARCO, y en 2001 en el Antiguo Colegio de San Ildefonso.
La curaduría de Fernando Botero. Una celebración estuvo a cargo de Lina Botero, hija del artista, quien buscó llamar la atención sobre los atributos formales (la técnica, la composición, la forma, la luz y el color) en la obra del artista colombiano, además de ofrecer un panorama de los temas que ha trabajado en sus más de sesenta años de trayectoria.
Fernando Botero nació el 19 de abril de 1932 en Medellín, provincia de Antioquia, Colombia. Y actualmente vive y trabaja entre Francia, Mónaco, Italia, Grecia, Estados Unidos y Colombia. A lo largo de su carrera, se ha caracterizado por la exploración de la sensualidad –que él asocia con la abundancia, la generosidad y la celebración de la vida–, y por la exaltación del volumen y la redondez de las formas –que no de la gordura–, que sin duda genera placer en el espectador. Ha desarrollado su característico estilo figurativo –llamado por algunos boterismo– dentro de la pintura, la escultura, el dibujo y la ilustración.
Además de interesarse en el retrato, las escenas costumbristas, la representación de la naturaleza y del cuerpo femenino –todo ello a partir de la memoria–, Botero ha sido un observador de la situación política y social de su natal Colombia y el resto del mudo, de manera que también ha tratado en su obra temas relacionados con diferentes aspectos de la violencia. Ha realizado asimismo numerosas paráfrasis de obras de artistas tan diversos como Andrea Mantegna, Diego Velázquez, Leonardo Da Vinci, Peter Paul Rubens, Hélène Fourmet, Alberto Durero, Èdouard Manet, Hyacinthe Rigaud y Michelangelo Merisi da Caravaggio, al conceder gran importancia a las influencias y a la observación en la formación del artista.
Fernando Botero. Una celebración, el Palacio de Bellas Artes, reúne un total de 177 obras (entre óleos, dibujos, piezas con técnica mixta, y esculturas de pequeño formato y monumentales), procedentes de colecciones particulares, del Berkeley Art Museum and Pacific Film Archive de la Universidad de California, y de la Fundación Mary Street Jenkins.
El recorrido está organizado a partir de diez núcleos temáticos. En primer lugar, bajo los títulos de Obra temprana y América Latina, se agrupan los temas recurrentes en el trabajo de Botero: la Colombia de su infancia y la América Latina de su adolescencia. Tras el apartado Religión y clero, se exhiben en el de Dibujo y técnica mixta varios trabajos en lápiz, carboncillo, pastel, sanguina, tinta, acuarela y tiza. Se presenta enseguida un grupo de once obras tridimensionales de pequeño formato dentro del núcleo de Escultura, mientras que otras cinco de formato monumental ocupan la explanada del museo.
En el segundo piso del Palacio, la exposición continúa con obras realizadas a partir de 2006 sobre El circo, tema en el que Botero encontró una infinidad de posibilidades plásticas y de colorido. Más adelante se exhibe, por primera vez, la serie de Abu Ghraib, en torno a las torturas llevadas a cabo en aquella cárcel iraquí a raíz de la invasión estadounidense. En el apartado titulado Versiones, se reúnen varias obras que, con el estilo particular del artista colombiano, rinden homenaje a los grandes maestros de la pintura universal –entre ellos, Piero della Francesca, Pablo Ucello, Peter Paul Rubens y Diego Velázquez. Por último, se presentan varias obras en torno al tema de los toros en el núcleo dedicado a La corrida, mientras que la exposición cierra con un grupo de bodegones bajo el título de Naturaleza muerta.
Fernando Botero. Una celebración permanecerá en las siete salas de exhibición y la explanada del Museo del Palacio de Bellas Artes hasta el próximo 17 de junio de 2012. Estará acompañada por diferentes actividades educativas, entre las que habrá conferencias, actividades infantiles, visitas guiadas para niños y proyección de documentales. El museo pondrá también a disposición del público un folleto sobre la exposición.
El libro-catálogo cuenta con textos de Mario Vargas Llosa, Carlos Fuentes, Jaime Moreno Villarreal, Juan Gustavo Cobo Borda y Lina Botero. La publicación incluye también cinco cuentos escritos e ilustrados por el artista, así como una biografía y una selección bibliográfica. El tiraje cuenta de 2,500 ejemplares en español, 100 de los cuales corresponden a una edición de lujo firmada por Botero. La presentación se llevará a cabo el 30 de marzo a las 11:00 horas, en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.
Museo del Palacio de Bellas Artes. Avenida Juárez esquina Eje Central Lázaro Cárdenas, Centro histórico, Delegación Cuauhtémoc, México D.F. Entrada general $35.00 / entrada libre a estudiantes, profesores o miembros del INAPAM con credencial vigente. Informes: 51.300.900 / museopalaciodebellasartes.gob.mx / www.palacio.bellasartes.gob.mx / www.bellasartes.gob.mx

No hay comentarios:

Publicar un comentario